Allá en el campo mexicano, el viejo
Elber González, un ganadero solitario pero vivaz, decide dejarle sus tierras, su ganado e incluso su hamaca a la sexy y curvilínea Carolina Guerrero, su vecina de toda la vida. A cambio, solo pide un poco de cariño de vez en cuando. Entre becerros, tequila y miradas ardientes, la cosa se pone seria.