Ashley Anderson no lleva bien sus clases en la universidad, y la envían al director para averiguar lo que está pasando. Robby Echo realmente está tratando de ayudar, pero descubre que la actitud, el vestido y en general Ashley son, sin duda, una distracción, por no mencionar sus labios regordetes y sus tetas rectas como misiles. Ashley le muestra a Robby que una pequeña distracción en el aula puede no ser tan mala después de todo, ¡chupar y follar hasta que su expediente académico esté tan limpio como ella!