Pablito convive ahora con una nueva madrastra,
Adry Blaze, una mujer intensa y desinhibida que no oculta su alto apetito sexual. Aprovechando la ausencia de su marido, La madrastra decide provocar a su hijastro, dejando claro que sus límites son mínimos. La tensión crece rápido y la situación deriva en un encuentro tan arriesgado como inevitable, donde ambos ceden al deseo ...